Un ruso reformista

Venden mucho los caballeros maduros ultimamente, se ve que no yerra el tópico que afirma que los hombres las prefieren jóvenes y hermosas, en tanto ellas se conforman con la seguridad material o afectiva de los individuos mayores y algo centrados. Pero de toda la pléyade de varones en edad provecta que han optado por un sistema mejor que el de la doctora Asland para alargar la vida, y alargarla, además, en plan alegre e interesante, la prensa se hace eco estos días de dos: Cela y Yeltsin.

El flamante Nobel y el líder reformista soviético, que andan, a sus años, metidos en la ciénaga devoradora de las pasiones. La Vanguardia ofrecía ayer sendas entrevistas de Lluis Amiguet y Manuel Díaz Prieto a «las mujeres de Cela», que tal era el nombre genérico del reportaje. 

Rosario Conde y Marina Castaño, «la santa» y «la otra». Pero a la vista de las declaraciones de estas mujeres relacionadas en tan feroz competencia con el escritor, se desprende que Rosario, la esposa, tiene más y más interesantes cosas que contar: «Yo creo que fue la operación tan grave que sufrió y que le puso al borde de la muerte. Entonces él se vió morir y eso le hizo pensar que le quedaba poco de vida y que debía aprovecharla para pasarlo bien, caiga quien caiga».

Lúcido análisis que apenas se ve empa ñado por el despecho: «Esa chica (por Marina) va por su fama, por su nombre y por su dinero» Y es que Rosario se muestra, acaso con toda la razón del mundo, como esas personas que cuando oyen la palabra amor echan mano al revólver. Según ella, jamás hubo amor en su matrimonio: «Yo nunca he estado enamorada de Camilo. Ni cuando me casé». Y añade con un deje de amargura: «El tampoco lo ha estado de mí, eso habría sido demasiado cursi para él». Nada de amor, pues, en la vida sentimental del Nobel, cuyo duro corazón retratado por la esposa contrasta con el que cree conocer «la otra», Marina: «Es un ser sumamente tierno, que se conmueve ante un animalito o ante un niño pequeño». 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Televisión LED de 19 pulgadas, OKI, a 115€ en Carrefour online

Alan Turing el matemático maricón incomprendido

¿Puedes decir si un niño miente?

Leticia Sabater la bizca que no dejó nunca de ser niña

Porque no hay ciclistas negros

¿Qué prefieres en la calle, baños o farolas?

Código descuento Aliexpress

Me han salido los tres hijos autistas

Estos murales inmersivos que brillan en la oscuridad son para observar las estrellas en interiores

La oscura historia detrás de Okunoshima, la “Isla de los Conejos” de Japón